Ático Nube

Proyecto seleccionado en la Guía de Arquitectura de Extremadura 2007-2017

Se plantea el proyecto como un ejercicio de flexibilidad de un espacio mínimo. Un gran mueble contenedor articula el espacio dividiéndolo en tres subzonas: estar-comedor, cocina y zona íntima. Este mueble no sólo resuelve todo el almacenaje de la vivienda sino que también incorpora en su interior los aparatos sanitarios. El espacio de baño, aparece cuando se va a hacer uso de alguno de ellos.

Cabe destacar en este proyecto, y llevando al límite esa idea de flexibilidad del espacio, el diseño de la cama. Esta se plantea como un cubo que queda suspendido en el aire y que permite su desplazamiento. En su movimiento nos aparece una biblioteca, una amplia zona de bañera, al mismo tiempo que permite a sus usuarios dormir en la zona del dormitorio o suspendidos sobre el salón para poder disfrutar de unas atractivas vistas lejanas a través del cierre que conecta a este con la terraza.

Un ejercicio de flexibilidad en el que la suma de las partes es mucho más que el conjunto, y en el que el espacio interior se transforma en función del uso que se quiera hacer de él.